La Ciudad de México, Distrito Federal, es la capital y sede de los poderes federales de los Estados Unidos Mexicanos. Es el núcleo urbano más grande del país, así como el principal centro político, académico, económico, de moda, financiero, empresarial y cultural. Se encuentra en la zona sur de la Cuenca de México, una gran cuenca en la alta meseta del centro del país. Cuenta con una población de cerca de 9 millones que suman 21 con el área conurbana, lo que la convierte en la tercera aglomeración urbana más grande del mundo, en la más grande del continente americano y la ciudad hispanohablante más poblada de la tierra.
Desde hace varios años el Gobierno de la Ciudad de México ha orientado sus políticas públicas hacia la innovación y la inclusión, privilegiando el derecho que niñas y niños tienen a desarrollarse en plenitud, libres de violencia y discriminación.
En ese marco, y atendiendo al diagnóstico sobre obesidad, sobrepeso y violencia que padecen niñas y niños en la ciudad, se ha gestado el programa SaludArte, estructurado en base a un modelo pedagógico que articula el Arte con dos áreas del cuidado de la salud: la actividad física y la educación en nutrición.
El programa contempla la integración de actividades dentro de cada una de estas áreas, así como la inserción de ejes articuladores que las atraviesen y que fortalezcan el desarrollo integral de las y los 22.000 niñas y niños inscritos en pro de la salud y la convivencia armoniosa.
La propuesta de atención de SaludArte consiste en educar a las niñas, niños y sus familias acerca de los beneficios que una adecuada alimentación y la realización de actividades físicas y artísticas, mediante conocimientos, habilidades y valores, a través de servicios de:
El programa SaludArte opera con niñas y niños de 84 establecimientos educativos ubicados en los sectores más vulnerables de la ciudad, alcanzando una cobertura de más del 70% de su población objetivo, lo que constituye un logro destacado de la iniciativa.
Carta de Ciudades Educadoras 11º Principio
“La ciudad deberá garantizar la calidad de vida de todos sus habitantes. Ello supone el equilibrio con el entorno natural, el derecho a un medio ambiente saludable, además del derecho a la vivienda, al trabajo, al esparcimiento y al transporte público, entre otros. A su vez, promoverá activamente la educación para la salud y la participación de todos sus habitantes en buenas prácticas de desarrollo sostenible”.