La educación es una de las principales herramientas de progreso que tienen nuestras ciudades y nuestros barrios. A través de la educación, nuestros vecinos crecen, se desarrollan y alcanzan una mejor realidad para sus familias y su futuro. Por eso, los jefes comunales tenemos la responsabilidad de darle a la educación un lugar preponderante en nuestros gobiernos y de construir ciudades verdaderamente educadoras. Esa convicción tiene que acompañarnos día a día porque la educación es el camino más sostenido hacia el futuro que queremos.